A pesar de haber iniciado las vacaciones de invierno para más de 24 millones de alumnos, la Secretaría de Educación Pública (SEP) ha dado a conocer nuevas reglas y lineamientos que entrarán en vigor tras el regreso a clases programado para el 8 de enero de 2024.
Según el Boletín 261 emitido por la SEP, se confirma que las escuelas de educación básica experimentarán cambios significativos en la preparación, distribución y venta de alimentos y bebidas, con el objetivo de promover estilos de vida saludables entre los estudiantes de preescolar, primaria y secundaria.
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La novedad más destacada es la prohibición de la venta y publicidad de alimentos conocidos como “comida chatarra” dentro de los planteles. Estos alimentos procesados o a granel, que no cumplen con los criterios nutricionales establecidos en el artículo 212 de la Ley General de Salud, no podrán ser comercializados en las escuelas de educación básica.
El decreto que introduce estas reformas a la Ley General de Educación fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el 21 de diciembre. Estas nuevas reglas, aplicables a cooperativas, establecimientos de consumo escolar, comedores y máquinas expendedoras, serán evaluadas y actualizadas cada cinco años, según lo confirmado por la SEP.
#20deDiciembre2023 Se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley General de Educación, en materia de Salud Alimentaria en las escuelas.@SEP_mx
👉— Diario Oficial DOF (@DOF_SEGOB) December 20, 2023
Es importante señalar que la SEP contará con un plazo de hasta 180 días, a partir de la publicación del decreto en el DOF, para actualizar los lineamientos generales relacionados con la venta y distribución de alimentos y bebidas procesadas en las escuelas de preescolar, primaria y secundaria. Esto podría implicar que las nuevas reglas no entren en vigencia de inmediato y se implementen hasta el próximo ciclo escolar.
Estos cambios buscan garantizar la salud y bienestar de los estudiantes, fomentando hábitos alimenticios saludables desde temprana edad. La comunidad educativa, incluyendo docentes, directores y padres de familia, jugará un papel crucial en la aplicación y seguimiento de estas nuevas disposiciones, que buscan contribuir al desarrollo integral de los estudiantes mexicanos.
Redacción Web
