El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha iniciado procedimientos penales y administrativos de oficio tras conocerse las afectaciones causadas por grafitis en el Montículo VI y el Monolito de la Plazoleta en la Zona de Monumentos Arqueológicos de Huapalcalco, ubicada en el municipio de Tulancingo, estado de Hidalgo.
En un pronunciamiento conjunto con el Gobierno del Estado de Hidalgo, se condenaron enérgicamente los hechos, catalogándolos como un atentado al patrimonio cultural hidalguense. Los monolitos, recientemente decretados como zona de monumentos arqueológicos en junio de este año, fueron objeto de vandalismo mediante la pintura de frases dirigidas contra el delegado del INAH, Osvaldo Sterpone.
Te puede interesar Reportan venta ilícita de pirotecnia en Tula
Únete a nuestro Canal de Whatsapp y recibe las noticias en tiempo real
El motivo de las pintadas parece estar vinculado a demandas de personal sindicalizado que exige la destitución del delegado por presuntos abusos y acoso laboral. Este conflicto laboral ha trascendido a través de actos que no solo perjudican la integridad del patrimonio, sino que también afectan la memoria ancestral de los pueblos originarios.
Las autoridades estatales y federales lamentaron los daños causados, señalando que estos actos de vandalismo no solo impactan la riqueza cultural de la comunidad de Huapalcalco, sino que también generan un detrimento a la memoria histórica de la región y del país en general.
El INAH y el Gobierno del Estado de Hidalgo han expresado su compromiso con la pronta investigación de estos hechos, con el objetivo de determinar responsabilidades y aplicar las medidas necesarias para la restauración y preservación de estos importantes sitios arqueológicos.
Redacción
