Los pasillos de la Central de Abastos de Pachuca se sumergen en una vibrante sinfonía de aromas y colores mientras los consumidores buscan los ingredientes perfectos para dar vida a la tradicional cena de fin de año.
En este bullicioso epicentro de abastecimiento, productos como camarón, romeritos, pierna, pescado, manzanas, frutos secos y uvas destacan entre las demandas más fervientes. La diversidad de ingredientes no solo refleja la riqueza gastronómica de la región, sino también las preferencias arraigadas en las festividades de fin de año.
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El camarón, comparte espacio en las canastas de los compradores con los romeritos, destacados por su papel protagonista en platillos típicos de la temporada. La pierna y el pescado, opciones clásicas para el platillo principal, se exhiben con frescura, listos para ser llevados a los hogares que buscan crear momentos memorables en la cena de despedida del año.
En medio de este ajetreo festivo, el mercado también ofrece manzanas, frutos secos y uvas, elementos esenciales para la mesa de fin de año. No obstante, se observa que la uva, un clásico de la celebración, ha alcanzado un precio de hasta 75 pesos por kilogramo, evidenciando la alta demanda y la importancia que se le atribuye en las festividades decembrinas.
La Central de Abastos de Pachuca se convierte así en un reflejo animado de las tradiciones culinarias y las expectativas festivas, donde la comunidad se congrega para seleccionar cuidadosamente cada ingrediente que culminará en la deliciosa y significativa cena de fin de año.
Redacción
