Omar Chaparro estuvo en el Festival Internacional de Cine de Guadalajara para la proyección de la película Un viaje al corazón: The Wingwalker
Guadalajara.- Con los años, Omar Chaparro aprendió a dejar atrás el pasado, a darle importancia a las cosas que realmente valen la pena.
El actor, quien está por cumplir 50 años de edad el próximo 26 de noviembre, asegura que ahora su mentalidad es diferente. Se describe como un hombre feliz y centrado.
“Estoy muy contento, creo que traía una mochila que me quité con el tiempo, dicen que la juventud es una enfermedad que se quita con los años. Estoy muy muy contento y esto apenas empieza”, afirmó Chaparro en entrevista.
El actor desfiló por la alfombra roja de la cinta “Un viaje al corazón: The Wingwalker”, dirigida por Alonso Álvarez y en la que Chaparro protagoniza junto a Héctor Jiménez, Max Arciniega, Will Rothhaar, Gustavo Sánchez y Jesús Ochoa.
El filme está inspirado en una historia verídica sobre un hombre que es deportado cuando su hija tiene programado un trasplante de corazón, lo que obligará al protagonista a cruzar las fronteras de regreso a Estados Unidos de la forma más audaz.
“Es la primera vez que estoy presentando una película que representa muchas cosas, estoy seguro que van a llorar, otros se cuestionarán, pero creo que la semilla de esta película comenzó hace 10 años gracias a Alonso Álvarez, que es como otro migrante que tiene el sueño americano, busca una vida mejor, cumplir sus metas, en este caso convertirse en el mejor director de México y esa travesía le costó muchas aventuras, desafíos, depresión, lágrimas, vivir en su coche y hasta llegar a parar en la cárcel de California.
“Los momentos más oscuros de nuestra vida, siempre son un regalo disfrazado, fue ahí donde surge la idea de hacer esta película, está inspirada en hechos reales. El personaje que verán en la cinta interpretado por Max Arciniega coescritor de la historia, ‘Rambo’, esa persona existe y estuvo en la cárcel, muchas de estas historias se convirtieron en este proyecto”, dijo.
A diferencia de otros años, el también comediante aseguró que ya no tiene expectativas sobre ciertos proyectos, solo deja que fluyan las cosas, para no se desilusionarse en caso de que no cumpla con lo que él imaginó.
“Prefiero que pase lo que tenga que pasar, estoy muy tranquilo porque sé que hice todo lo que tenía que hacer porque estuve en el momento, lo disfruté, lo lloré, lo gocé, lo sufrí, lo padecí, me deprimí fui a terapia.
“Ya prefiero no tener expectativas, ya he dicho muchas veces: ‘este es el proyecto vas a ver, con esta sí vamos a pagar la casa y luego no pasa nada”, sostuvo.
Por el momento, la película “Un viaje al corazón. The Wingwalker”, que se presentó en la edición 39 del Festival Internacional de Cine en Guadalajara, aún no tiene fecha de estreno.