Un colectivo defensor de este municipio asegura que el gobierno sigue otorgando permisos a aserraderos pese a que agotaron algunas especies
En el bosque de Acaxochitlán ya no se ven ni ocotes y encinos, asegura el colectivo Ocotenco Kuautlali, debido a que los aserraderos agotaron por completo a estas especies. Pese a tal problema, denuncian que autoridades federales siguen dando permisos a este tipo de negocios para operar en la región.
Dicho colectivo, cuya misión es proteger las regiones boscosas de la localidad de Zacacuautla en el Pueblo Mágico, denunció que las autoridades autorizaron seis aserraderos, además, observaron que es recurrente la circulación de vehículos de carga con troncos extraídos de forma lícita o ilícita.
“Llevamos años luchando contra la tala clandestina, en concreto mi organización Ocotenco Kuautlali de 2007 a la fecha ha denunciado la tala clandestina que no para y las autoridades no han intervenido. Entonces, ¿qué pasa?, ¿nos preocupamos por el cambio climático o solo son documentos, papeles?”, cuestionó ante medios la activista Filiberta Nevado.
Algunas consecuencias de la tala inmoderada que han detectado ellos, son la desaparición de especies como encino y ocote, así como dos manantiales que se secaron.
El pasado mes de abril, la policía municipal de Acaxochitlán reportó dos nuevos operativos en contra de la tala clandestina, correspondientes a las localidades de Tlatzintla y Venta Quemada, respectivamente. En los dos casos, fue con recorrido en zonas boscosas de las referidas comunidades, razón por la que no hubo detenidos.
En este año, se han reportado además de estos decomisos, otros cinco en las localidades de Chimalapa, Tlamimilolpa, Buenavista, Montemar y Ejido Tlazintla.
En ellas, se decomisaron un total de 427 trozas de presunta tala clandestina. Uniformados mencionaron que las acciones se dieron luego de recorridos de vigilancia, además de que las maderas fueron dispuestas ante las autoridades federales según lo estipula el procedimiento.