Martínez Noguez, conocido en el medio como “El llanero”, regresaba a Celaya tras cubrir un evento en Villagrán cuando fue atacado por personas armadas
La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) condenó enérgicamente el asesinato del periodista Alejandro Martínez Noguez, ocurrido el día de ayer en el municipio de Villagrán, Guanajuato. En un comunicado emitido este lunes, la organización hizo un llamado urgente a las autoridades para que se investigue este crimen de manera pronta y efectiva, poniendo especial énfasis en la labor periodística como línea de investigación prioritaria.
Martínez Noguez, conocido en el medio como “El llanero”, regresaba a Celaya tras cubrir un evento en Villagrán cuando fue atacado por personas armadas. El vehículo en el que se trasladaba, asignado por el municipio como parte de su esquema de protección, fue blanco de disparos que resultaron en la muerte del periodista y lesiones graves a los dos escoltas que lo acompañaban. El comunicador ya contaba con medidas de protección otorgadas por el mecanismo federal tras sufrir un intento de homicidio en 2022.
Jesús Peña Palacios, Representante Adjunto en México de la ONU-DH, declaró que “estos ataques contra quienes nos informan lesionan la democracia y el acceso a la información”. Subrayó la urgencia de que las autoridades “redoblen esfuerzos para poner fin a la violencia contra quienes ejercen el periodismo”, enfatizando que solo con un “compromiso firme y acciones concretas” se podrá garantizar un entorno seguro para el ejercicio de la libertad de expresión.
El ataque ha generado consternación en el gremio periodístico de Guanajuato, un estado que en los últimos años ha visto un aumento preocupante en los casos de violencia contra comunicadores. Martínez Noguez, con una trayectoria destacada en medios locales como El Sol del Bajío, a.m de Celaya y El Heraldo, así como en su propio portal “El Hijo del Llanero Solititito”, se había convertido en una figura emblemática de la cobertura policiaca en la región.
La ONU-DH también expresó su solidaridad con la familia y amistades del periodista, al tiempo que deseó una pronta recuperación a los escoltas lesionados. Finalmente, reiteró la necesidad de una investigación exhaustiva y eficaz que no solo esclarezca los hechos, sino que también sancione a todos los responsables, sentando un precedente en la lucha contra la impunidad en los crímenes cometidos contra periodistas.
Hasta el momento el Hospital General de Celaya, donde se encuentran los escoltas heridos, permanece fuertemente custodiado por la Policía Municipal.
Publicado originalmente en El Sol del Bajío