Miles de pobladores de Chilpancingo salieron a las calles para exigir justicia por el asesinato de su alcalde, Alejandro Arcos Catalán, quien fue decapitado este domingo
Miles de personas salieron a las calles de Chilpancingo, Guerrero, para dar el último adiós a Alejandro Arcos Catalán, alcalde del municipio asesinado este domingo.
La jornada del domingo, el cadáver del edil del PRD fue encontrado en un vehículo abandonado en la calle 1 de colonia Villas del Roble de la capital de Guerrero.
El cadáver fue llevado al Servicio Médico Forense (Semefo) donde familiares de Arcos Catalán confirmaron su muerte.
La noche del domingo, el cuerpo abandonó las instalaciones del Semefo de Chilpancingo, y fue llevado a una funeraria para después el féretro fuera trasladado a la Parroquia del Barrio de la Santa Cruz para ser velado.
A este lugar arribaron durante la noche y mañana de este lunes, funcionarios del gobierno municipal así como políticos locales del PRI y del PRD.
Entre algunos de los políticos que acudieron a dar el pésame a la familia, fue el ex gobernador Héctor Astudillo Flores y el ex candidato al Senado, Mario Moreno Arcos; por parte del gobierno estatal no acudieron representantes.
Personal del gobierno de Guerrero acudió a entregar una corona a nombre de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda. En el lugar un grupo de personas acudió con pancartas para exigir justicia y también con mensajes para despedir a Arcos Catalán.
A la par, trabajadores del Ayuntamiento de Chilpancingo comenzaron a colocar veladores en una de las entradas del inmueble a manera de homenaje.
Mario Ruiz Valencia, quien es dirigente del PRD en Guerrero, se pronunció sobre el caso y pidió que la Fiscalía General de la República (FGR) atraiga las investigaciones, pues señaló que el partido no tiene confianza en la fiscalía local, dados los nulos resultados en el esclarecimiento de expedientes.
Cerca de las 14:30 horas, el cortejo fúnebre salió de la parroquia de la Santa Cruz hacia la Catedral de Santa María de la Asunción, donde se realizaría una misa de cuerpo presente.
Durante el trayecto cientos de personas salieron a las calles a dar el último adiós al alcalde perredista, quienes con el paso del cortejo fúnebre gritaban “justicia” y “presidente” en repetidas ocasiones; mientras que otros le arrojaban pétalos de rosa a la carroza.
Después de la misa de cuerpo presente se formaron dos vallas humanas de la entrada de la Catedral hacia el Palacio Municipal, donde Arcos Catalán fue despedido por decenas de trabajadores.
Fue en la misa en la que estuvo presente Rubén Hernández Fuentes, quien es pareja de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, quien se retiró después de la misa.
Cuándo las personas comenzaban a abandonar el lugar, fue vista la ex alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández Martínez, quien ya se retiraba cuando algunas personas le gritaron “fuera”, lo que provocó algunos jaloneos entre los presentes y sus colaboradores.
El cortejo fúnebre salió hacia el Parque Cementerio la Paz, donde se realizaría el sepelio en una ceremonia privada.
Publicado originalmente en El Sol de Acapulco