La sede fue el ex convento agustino, que abrió sus puertas por primera vez para un recital de este tipo
Por primera vez en sus 484 años de historia, el ex convento agustino dedicado al Señor de Singuilucan en este municipio, abrió sus puertas para un concierto navideño de la Orquesta Sinfónica del Estado de Hidalgo (OSEH), ensamble que presentó a 60 músicos bajo la batuta del maestro Héctor Javier Reyes Bonilla.
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Es así que desde antes de las 18:00 horas, al menos 200 asistentes, entre lugareños pero también de otros municipios, abarrotaron este espacio considerado único en la región por sus condiciones arquitectónicas y artísticas.
Basta con apreciar su altar principal: confeccionado en un claro estilo plateresco y churriguerresco, enaltecido por la imagen de Jesucristo crucificado que en esta demarcación le refieren como “El Señor de Singuilucan”, principal advocación cristiana a la que se le rinden honores y fiestas cada mes de mayo.
Las palabras de apertura las ofreció primeramente el párroco Erasmo Dorantes, quien tuvo a bien recordar y parafrasear la frase de San Agustín que dicta “el que canta, ora dos veces, el que toca bien, también ora dos veces”, a lo que agradeció la presencia de los músicos y pidió dedicar el recital a Jesucristo.
Tras una breve explicación sobre la edificación del ex convento que expuso el cronista regional, Eladio López, el maestro Héctor Reyes alzó la batuta y entonces comenzaron a fluir 13 piezas sinfónicas ad hoc a la temporada de Navidad, entre las que hubo repertorio internacional y también mexicano. Desde los clásicos “Blanca Navidad”, “Paseo en Trineo” y “Navidad en Rock Pop”; pasando por las clásicas de las posadas “Dime Niño de Quién Eres” y “La Marimorena”.
Sin embargo, los momentos más emocionantes de la velada fueron con “Santa Claus llegó a la ciudad”, pieza que detonó las palmas en algunos asistentes, así como sonrisas; también con la interpretación de las piezas compuestas por Tchaikovsky, en el momento en que la OSEH presentó extractos de la Suite del Cascanueces.
Al cierre del evento, la presidenta municipal de Singuilucan, Yazmín Dávila, señaló que con este evento arrancaron formalmente los festejos navideños en la demarcación. Por otro lado, aseguró que una orquesta no se presentaba en este municipio desde hace al menos 15 años. Asimismo, expuso que Singuilucan es una tierra en la que la población está dispuesta a participar del arte y la cultura, incluso aseveró que hay varios artistas que lamentablemente no cuentan con el apoyo necesario.
“Singuilucan está abierto y ávido de la cultura, aquí hay mucha gente que se expresa. Tenemos pintores, tenemos muralistas, tenemos músicos, pero más bien creo que el problema es que no se les ha apoyado. La gente va sola y muchas veces son personas con talento que carecen de los recursos para poder desarrollar su habilidad”, concluyó.