Las celebración se llevó a cabo en la comunidad indígena Bomintzhá
Con fe y devoción pobladores de la comunidad indígena Bomintzhá, perteneciente a Tula de Allende, realizaron una celebración religiosa por el primer aniversario de la coronación canónica diocesana de la Señora de Natividad de la Virgen María, este domingo 8 de diciembre.
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Desde temprana hora los feligreses presenciaron la misa en honor a la mencionada virgen, la cual fue oficiada por el párroco Flavio Ramírez, quien dijo que la mejor ofrenda y regalo que le pueden brindar es “ser un buen cristiano”.
Por su parte, el presidente del Comité de la Capilla en honor a la Señora de Natividad, Cristian Guerrero Barbosa, así como Javier Reyes, Alfonso Rodríguez y Andrea, habitantes de la localidad, aseguraron que la virgen les ha concedido algunos milagros, por lo que se encuentra resguardada en un templo del siglo XVI que fue construido por los franciscanos. Además, mencionaron que la imagen proviene de hace más de trescientos años y que está elaborada con el corazón de un árbol de roble.
“También ha curado a gente de algunas enfermedades y ha protegido a esta localidad indígena de cosas malas. La imagen es una pieza única”, indicaron.
