Con un viaje por el pasado de los Juegos Olímpicos, pasando por el show de Phoenix y el relevo de Los Ángeles 2028, París cerró por todo lo alto su edición de la justa
París. La nostalgia invadió La Ciudad Luz. París cerró el telón a los Juegos Olímpicos, el pebetero que estuvo encendido por espacio de tres semanas se apagó. El globo suspendido en el aire en el Jardín de las Tullerías descendió para dar por concluida la competencia.
El Estadio de Francia abrió sus puertas para que miles de personas se dieran cita al inmueble, fuertemente custodiado por más de 3 mil policías y gendarmes. El Comité Organizador no quiso que nada se les escapara de las manos.
Mientras que en Las Tullerías descendía el pebetero de la mano del nadador francés Léon Marchand que logró cuatro medallas de oro y una de bronce, en el Stade de France iniciaba la fiesta final.
Una orquesta fue la encargada de que miles de gargantas se unieran para entonar La Marsellesa, himno del anfritrión, mientras se izaban las banderas del Comité Olímpico Internacional (COI) y del país galo.
Después, el desfile de las 205 delegaciones participantes. México lo hizo con el medallista de plata, el boxeador Marco Verde, así como Nuria Diosdado, capitana del equipo de natación artística. También aparecieron 9 mil deportistas que estuvieron presentes en la Ceremonia de Clausura y lo hicieron todo bajo el ritmo de la banda francesa Justice.
We Are the Champions, la icónica canción de Queen, fue el último reconocimiento que recibieron los campeones que estuvieron en la ceremonia de Clausura.
La equidad de genero estuvo presente en París, por ello, la Maratón Femenil fue la protagonista del cierre de competencias. La neerlandesa Sifan Hassan, la etiope Tigst Assefa y la keniana Hellen Obiri recibieron sus medallas en el Estadio de Francia.
El COI destacó la labor de los 45 mil voluntarios cuyo trabajo fue clave para la organización de evento, y le dio la bienvenida a los nuevos miembros elegidos del COI para la Comisión de Atletas.
Clausura de París 2024 viaja al pasado de los Juegos Olímpicos
El juego de luces en el escenario y en la tribuna anunciaba el inicio de la cerenomia artística. Un “viajero del espacio” bajó desde lo alto al centro del estadio, recibió la bandera de Grecia, cuna de los Juegos Olímpicos e hizo un recorrido por el lugar que simuló ser la tierra, mientras la “Victoria alada de Samotracia”, que representa a la diosa de la victoria, se postró en el recinto.
El “Viajero alado” había descubierto vestigios de los Juegos y después de entonarse el Himno Apolo, el más antiguo de la Grecia clásica, ayudó, junto con decenas de acróbatas, a que cinco círculos se unieran y formaran los aros olímpicos, símbolo del espíritu olímpico.
Phoenix sorprende al Stade France
En el centro del escenario apareció la banda de rock francés Phoenix, formada en Versalles y que tuvo su auge en la década de los noventa. El estadio se encendió desde el inicio cuando interpretaron “Lisztomania”. Kavinsky, la belga Angéle, y Playground Love se unieron a las celebraciones.
Thomas Bach, presidente del COI, y Tony Estanguet, presidente de París 2024, se hicieron presentes junto con destacados deportistas; Estanguet dio las gracias a todos los que estuvieron involucrados en los Juegos Olímpicos y, con estas palabras, arrancó la ceremonia de transición.
París pasa la estafeta a Los Ángeles 2028
Bach le entregó la bandera olímpica a Karen Bass, alcaldesa de Los Ángeles, quien estuvo acompañada por la multimedallista Simones Biles. Después de que se entonó le himno de Estados Unidos, desde lo alto apareció el actor Tom Cruise, quien bajó con una cuerda al estilo de sus famosas películas de Misión Imposible y se llevó el lábaro a la unión americana.
Con una proyección llegando la bandera a norteamerica y con canciones de Red Hot Chili Peppers, Billie EIlish y Snoop Dogg, así como el momento en que varios deportistas encabezados por Léon Marchand apagaron la flama olímpica, acabó la ceremonia de transición.
Así cerró el telón de los Juegos Olímpicos de París; el evento queda en el recuerdo e inicia un ciclo olímpico más, cuatro años en el que Los Ángeles se preparará para albergarlos. París ya le dio la estafeta a la ciudad estadounidense e inicia la cuenta regresiva para el arranque de una edición más de la máxima justa deportiva.
Publicado originalmente en ESTO